sábado, 14 de abril de 2012

El Ángel Sellador

Versículo de memoria

“Vi también a otro ángel que subía de donde sale el sol, y tenía el sello del Dios vivo” Apocalipsis 7:2.

El Ángel con el Sello

1. ¿Qué vio el apóstol Juan ascendiendo del oriente? ¿Qué mensaje proclamó el ángel con fuerte clamor? Apocalipsis 7:2, 3.

2. ¿Indica la palabra ‘oriente’ una dirección específica o un lugar? Comparalo con el hecho que todas las aperturas del santuario se orientaban hacia el oriente. Apocalipsis 7:2; Juan 10:9.

“Entonces el ángel que me acompañaba dirigió de nuevo mi atención a la ciudad, donde vi cuatro ángeles que volaban hacia la puerta…

“Vi cuatro ángeles que habían de hacer una labor en la tierra y andaban en vías de realizarla. Jesús vestía ropas sacerdotales. Miró compasivamente al pueblo remanente, y alzando las manos exclamó con voz de profunda compasión: ‘¡Mi sangre, Padre, mi sangre, mi sangre, mi sangre!’ Entonces vi que de Dios, sentado en el gran trono blanco, salía una luz en extremo refulgente que derramaba sus rayos en derredor de Jesús. Después vi un ángel comisionado por Jesús para ir rápidamente a los cuatro ángeles que tenían determinada labor que cumplir en la tierra, y agitando de arriba abajo algo que llevaba en la mano, clamó en alta voz: ‘¡Retened! ¡Retened! ¡Retened! ¡Retened¡ hasta que los siervos de Dios estén sellados en la frente’” (Primeros Escritos, págs. 37, 38).

3. ¿A quién representa el ángel que viene del oriente con el sello del Dios vivo? Apocalipsis 7:2; 14:9.

“El profeta vio ‘a cuatro ángeles en pie sobre los cuatro ángulos de la tierra, que detenían los cuatro vientos de la tierra, para que no soplase viento alguno sobre la tierra, ni sobre el mar, ni sobre ningún árbol’. Otro ángel, subiendo desde el este, clamó a ellos a gran voz, diciendo: ‘No hagáis daño a la tierra, ni al mar, ni a los árboles, hasta que haya­mos sellado en sus frentes a los siervos de nuestro Dios’. Esto señala el trabajo que ahora debemos hacer, a saber, clamar a Dios para que los ángeles detengan los cuatro vientos hasta que sean enviados misioneros a todas partes del mundo, y hayan proclamado la advertencia contra los que desobedecen la ley de Jehová” (Eventos de los Últimos Días, pág. 128).

“El tercer ángel, que vuela por en medio del cielo, y proclama los mandamientos de Dios y el testimonio de Jesús, representa nuestra obra. El mensaje no pierde fuerza mien­tras el ángel vuela hacia adelante; porque Juan lo ve aumentar en fortaleza y poder hasta que toda la tierra está iluminada con su gloria. El pueblo que guarda los mandamientos de Dios va hacia adelante, siempre hacia adelante. El mensaje de verdad que proclamamos debe ir a toda nación, lengua y pueblo. Pronto se proclamará con fuerte voz, y la tierra será iluminada con su gloria. ¿Nos estamos preparando para este gran derramamiento del Espíritu de Dios?” (Joyas de los Testimonios, tomo 2, pág. 169).

“Al tercer ángel se lo presenta volando en medio del cielo, y proclamando en alta voz: ‘Aquí está la paciencia de los santos, los que guardan los mandamientos de Dios y la fe de Jesús’ (Apoc. 14: 12)” (Mensajes Selectos, tomo 2, pág. 134).

Aquellos que tienen el Sello

4. ¿Qué grupo vio el apóstol Juan con el Cordero en el Monte de Sión? ¿Quié­nes son? Apocalipsis 14:1.

“Miré hacia la tierra para buscar al pueblo adventista, pero no lo hallé en parte alguna, y entonces una voz me dijo: ‘Vuelve a mirar un poco más arriba.’ Alcé los ojos y vi un sendero recto y angosto trazado muy por encima del mundo…

“Pronto oímos la voz de Dios, semejante al ruido de muchas aguas, que nos anunció el día y la hora de la venida de Jesús. Los 144.000 santos vivientes reconocieron y entendie-ron la voz; pero los malvados se figuraron que era fragor de truenos y de terremoto…

“Los 144.000 estaban todos sellados y perfectamente unidos. En su frente llevaban escritas estas palabras: ‘Dios, nueva Jerusalén,’ y además una brillante estrella con el nuevo nombre de Jesús” (Primeros Escritos, págs, 14, 15).

5. Al final, ¿por qué muchas personas se chasquerán? Mateo 7:23; 25:11, 12.

“La gran masa de llamados cristianos sufrirán un amargo desengaño en el día de Dios. No tienen sobre sus frentes el sello del Dios viviente.

“Sólo los que reciban el sello del Dios viviente tendrán el pasaporte para pasar por los portales de la santa ciudad” (Comentario Bíblico Adventista, tomo 7, pág. 981).

6. ¿Qué intentará hacer el enemigo de la verdad presente durante el tiempo del sellamiento? Mateo 24:4; Isaías 9:16.

“Los enemigos de la verdad presente han estado tratando de abrir la puerta del lugar santo, que Jesús cerró, y de cerrar la puerta del lugar santísimo, que Él abrió en 1844, donde está el arca que contiene las dos tablas de piedra en las cuales fueron escritos por el dedo de Jehová los diez mandamientos.

“En este tiempo de sellamiento Satanás está valiéndose de todo artificio para desviar de la verdad presente el pensamiento del pueblo de Dios y para hacerlo vacilar. Vi una cubierta que Dios extendía sobre su pueblo para protegerlo en tiempo de aflicción; y toda alma que se hubiese decidido por la verdad y fuese de corazón puro había de ser cobijada por la cubierta del Todopoderoso.

“Satanás sabía esto y obraba con gran poder para mantener vacilantes y perturbados acerca de la verdad a tantos como le fuese posible” (Primeros Escritos, pág. 43).

El Tiempo del Sellamiento

7. La obra del tercer ángel se inicio en 1844. ¿Cuál es su misión? ¿Cuándo empezó su obra de sellamiento? Apocalipsis 14:9.

“Cuando cesó el ministerio de Jesús en el lugar santo y pasó Él al santísimo para estar de pie delante del arca que contenía la ley de Dios, envió otro poderoso ángel con un tercer mensaje para el mundo…

“Vi luego el tercer ángel. Dijo mi ángel acompañante: ‘Su obra es terrible. Su misión es tremenda. Es el ángel que ha de separar el trigo de la cizaña, y sellar o atar el trigo para el granero celestial. Estas cosas debieran absorber completamente la mente y la atención’” (Primeros Escritos, págs. 254, 118).

8. ¿Qué mensaje proclama el ángel sellador a aquellos que retienen los vientos de contiendas? Considerando que la visión del sellamiento (expuesta en las siguientes notas) fue dada en 1849, ¿qué se puede entender acerca de cuándo se inició la obra del sellamiento? Apocalipsis 7:3.

“Vi cuatro ángeles que habían de hacer una labor en la tierra y andaban en vías de realizarla. Jesús vestía ropas sacerdotales. Miró compasivamente al pueblo remanente, y alzando las manos exclamó con voz de profunda compasión: ‘¡Mi sangre, Padre, mi sangre, mi sangre, mi sangre!’ Entonces vi que de Dios, sentado en el gran trono blanco, salía una luz en extremo refulgente que derramaba sus rayos en derredor de Jesús. Después vi un ángel comisionado por Jesús para ir rápidamente a los cuatro ángeles que tenían determinada labor que cumplir en la tierra, y agitando de arriba abajo algo que llevaba en la mano, clamó en alta voz: ‘¡Retened! ¡Retened! ¡Retened! ¡Retened¡ hasta que los siervos de Dios estén sellados en la frente’.

“Pregunté a mi ángel acompañante qué significaba lo que oía y qué iban a hacer los cuatro ángeles. Me respondió que Dios era quien refrenaba las potestades y que encargaba a sus ángeles de todo lo relativo a la tierra; que los cuatro ángeles tenían poder de Dios para retener los cuatro vientos, y que estaban ya a punto de soltarlos, pero mientras aflojaban las manos y cuando los cuatro vientos iban a soplar, los misericordiosos ojos de Jesús vieron al pueblo remanente todavía sin sellar, y alzando las manos hacia su Padre intercedió con Él, recordándole que había derramado su sangre por ellos. En consecuencia se le mandó a otro ángel que fuera velozmente a decir a los cuatro que retuvieran los vientos hasta que los siervos de Dios fuesen sellados en la frente con el sello de Dios” (Primeros Escritos, págs. 37, 38).

Repaso y Meditación

• ¿Cuál es la relación entre el tercer ángel y el ángel del sellamiento?

• ¿Por qué muchas personas se decepcionarán cuando Jesús venga?

• ¿Se encuentra el inicio de la obra del sellamiento en el futuro o en el pasado?

“Otro ángel, subiendo desde el este, clamó a ellos a gran voz, diciendo: ‘No hagáis daño a la tierra, ni al mar, ni a los árboles, hasta que hayamos sellado en sus frentes a los siervos de nuestro Dios’. Esto señala el trabajo que ahora debemos hacer, a saber, clamar a Dios para que los ángeles detengan los cuatro vientos hasta que sean enviados misioneros a todas partes del mundo, y hayan proclamado la advertencia contra los que desobedecen la ley de Jehová” (Eventos de los Últimos Días, pág. 128).